Cultura
El patrimonio cultural del municipio de Válor se refleja tanto en el patrimonio monumental, agrícola y urbano, como en las fiestas, folclore y suculenta gastronomía.
Patrimonio monumental y urbanístico
El principal patrimonio monumental y urbano de Válor lo componen sus barrios y alquerías, con esa traza medieval que le caracteriza, junto a sus fuentes y lavaderos, iglesias y ermitas:
Ermita de la Virgen de la Antigua: Se transformó eliminando la cubierta de teja árabe y construyendo una planta superior con cubierta plana. Conserva una imagen de la Virgen de la Antigua, en Válor.
Ermita de la Virgen de Lourdes: Una de las ermitas de mayor calidad histórica y artística en la zona. En el lateral sur se encuentra adosado un pequeño cementerio. Ubicada en el núcleo de Válor.
Iglesia de Mecina Alfahar: Es la última iglesia decimonónica levantada en La Alpujarra, pese a su modernidad, mantiene algunas características de la arquitectura religiosa mudéjar, como el esquema de la portada y algunos elementos de la armadura.
Iglesia de Nechite: Pese a su modestia, reúne en un mismo edificio elementos significativos del mudéjar y del barroco. Hay que destacar el trozo de cruz de mármol que aparece en el arco de la portada, y que podría ser un testimonio de la Rebelión Morisca.
Iglesia de Válor: La primitiva iglesia debió construirse a mediados del siglo XVI y no fue quemada durante la Rebelión, por lo que una década más tarde estaba”buena y sana”. Conserva el camarín más antiguo de La Alpujarra.
Vía Crucis de Válor: Conjunto de cruces de forja dispuestas sobre las fachadas de diferentes casas. Es uno de los pocos vía crucis con elementos primitivos que se conservan en la comarca.
Fuente de Cuesta Viñas: Situada en el entorno de lo que fue el antiguo núcleo, hoy desaparecido, de Cuesta Viñas. Gentes de Yegen y Válor acuden a celebrar, cada 25 de julio -Día de Santiago- y 15 de agosto -Día de La Asunción-, sendas fiestas populares. Antiguamente se organizaban importantes fiestas al anochecer, durante los meses de verano.
Fuente de la Garría: Formada por un pilar en cuyo borde frontal se percibe el desgaste del apoyo de los cántaros. El frontón se encuentra rematado por cornisa simple y pirámide. Situada en el núcleo de Válor.
Fuente de la Plaza de la Iglesia de Mecina Alfahar: Construida con piedra de cantería, posee un pilar abrevadero con frontón, del que manan dos caños. Es una de las fuentes históricas de la zona y conserva en buen estado la estructura primitiva.
Lavadero de Fuente Bajuna: Hasta los años 60 del siglo XX, en que fue remodelado y adquirió su actual configuración, las mujeres lavaban arrodilladas. Bajo el lavadero aparece una pequeña balsa que recoge el agua de salida.
Castillejo de Válor: Restos de muralla de un poblado fortificado de la primera época islámica y que estuvo ocupado desde el siglo IX al siglo XI, aunque los restos cerámicos corresponden a épocas anteriores. Jugó un papel importante en la Sublevación Morisca del siglo XVI. Es uno de los castillos más grandes de la comarca y se conserva casi en su totalidad. Localizado frente al Cortijo de Turrillas.
Tajo de las Ventanas: Conjunto de cuevas excavadas en el tajo, de época medieval, relacionadas con el antiguo castillo ubicado sobre las mismas. Se han podido utilizar para el almacenamiento del grano.
Jardín de Isabelita: Situado en la parte posterior de la Casa Señorial de Francisco Suárez. Es uno de los pocos jardines históricos, del siglo XIX, que sobrevive en el municipio. Con árboles frutales y palmeras de gran tamaño.
Jardín de la Casa de Francisco Almendros: Conjunto de especies arbóreas en el que destacan cuatro magnolios, dos palmeras, una palma alta y una falsa pimienta. Posiblemente de finales del siglo XIX.
Barrio de Cantarranas: Antiguo barrio medieval de los siglos X al XV, formado por un conjunto de viviendas escalonadas y espaciadas que conserva los rasgos característicos de la arquitectura medieval musulmana de la comarca, con porches, tinaos y adarves. Se asienta sobre el Yacimiento de Cantarranas, aprovechando la estructura de la antigua edificación.
Puente de la Tableta: De época nazarí, constituyó una parte fundamental en el trazado del antiguo camino vertebrador de la comarca hasta la construcción de la nueva carretera a principios del siglo XX.
Patrimonio agrícola
Los conjuntos molinares del Barranco de San Blas y del Río Válor son algunas de las importantes riquezas etnológicas del municipio de Válor. Se trata de una potente actividad agroindustrial que merecía el ascenso de diversas reatas de bestias para trasladar el producto desde Berja y Dalias. En este sentido, el Molino de Hoya Cara es uno de los molinos de la comarca cuya actividad ha perdurado más tiempo. En el Camino de los Molinos, junto la acequia Real, se sitúan el Molino de Andrés, el Molino de la Molinera y el Molino del Santo. El Molino Natalio, frente al cual se sitúa una era, y el Molino Capazorras, ambos ubicados en el Río Válor.
Igualmente las eras de San Blas constituyen un conjunto de alto valor etnológico y paisajístico relacionado con el anterior y que como el primero, merece un tratamiento adecuado. La Era del Molino Natalio tiene forma poligonal, hecho poco común en la comarca. La Era del Cerrillo del Tuerto, en Válor, utiliza la roca madre como parte de la solería, también en Válor la Era del Cortijo El Jurel, posee un amplio dominio paisajístico. En Nechite, en la Era de El Cuco existe una máquina aventadora.
La Balsa de San Blas, ubicada en Nechite, recibe su caudal de la Acequia Real y se pueden usar dos líneas de riego, una directa de la acequia, y otra desde la balsa.
La Fuente de la Venta del Río Nechite, en Mecina Alfahar, abastecía, para consumo humano y ganadero, a los distintos cortijos del entorno.
El Partidor de la Acequia Real de Nechite, de posible origen medieval, reparte el agua entre las poblaciones de Ugíjar, Válor, Mecina Alfahar y Nechite, devolviendo al río, en fuerte cascada.
La calzada histórica de la Cuesta de Cantarranas se presenta empedrada con lajas y desciende zigzagueante hasta el Molino de Cantarranas. Supone una notable obra de ingeniería popular.
Fiestas
Fiestas de San Antonio: 17 de enero. Se desarrollan en Mecina Alfahar.
San Marcos: 25 de abril. Tiene lugar en Mecina Alfahar y se degustan las típicas «ollas de San Marcos».
Fiestas de San Cayetano: Primera quincena de agosto. Se celebran en Nechite.
Fiestas de Moros y Cristianos en honor al Santo Cristo de la Yedra: El 15 de septiembre tiene lugar la Representación de Moros y Cristianos argumentada en la sublevación de los moriscos granadinos a finales de 1568, esta representación es una de las más completas y hermosas de Andalucía. En la representación podemos ver una colorida gama de trajes típicos del siglo XVI y disfrutar de una magnífica interpretación del texto escrito por la poetisa granadina Enriqueta Lozano. Es sorprendente el desfile de tropas moriscas y cristianas que se realiza en a representación así como la batalla entre Moros y Cristianos que se caracteriza por su feracidad y estruendo. Es común el uso de armas de avancarga, más conocidas como «retacos» o «trabucos» ,que no sólo dan una imagen fiel del armamento de la época, sino que además crean un gran aliciente y espectacularidad para los visitantes, que quedan asombrados del derroche de pólvora y de las ensordecedoras salvas que los soldados ejecutan, todo ello en medio de una autentica batalla llena de zarandeos y ataques entre Moros y Cristianos.
Fiestas de la Virgen de la Antigua: 24 y 25 de septiembre, en la que se celebran actos religiosos que constan de misa y procesión en honor a la Virgen. Asimismo tienen lugar actividades lúdicas como juegos y cucañas y los vecinos bailan hasta el amanecer en la verbena. Las tracas y fuegos artificiales son una constante en las fiestas.
Baile de las Ánimas: 25 de diciembre, en la que un grupo de personas recorren las calles tocando sus instrumentos y pidiendo donativos para las fiestas patronales, derivación de aquella vieja costumbre de demandar limosna para enterrar a las personas que morían sin recursos económicos.
Fiestas patronales en honor a San Antón (Mecina Alfahar): Se celebra el fin de semana más próximo al 17 de enero.
Fiestas patronales en honor a la Virgen de la Antigua (Nechite): Se celebra el fin de semana más próximo al 24 de septiembre.
Gastronomía
Como parte del patrimonio de La Alpujarra, las recetas tradicionales de sus platos hechas con productos de la tierra, han pasado de generación en generación. En el municipio de Válor, una de las recetas más notorias son los Hinojos al Ajillo, elaborados con hinojos, almendras, ajo y pimiento seco. Y, como herencia de la repostería morisca, están los Soplillos, a base de huevos, almendras, azúcar y limón.
Historia
Aunque existan restos desde la Edad del Bronce y haya vestigios también de la época romana, lo cierto es que Válor nace como población en la época islámica y conserva casi totalmente su fisonomía de entonces, con calles estrechas y casas típicamente alpujarreñas.
Perteneció a La Tahá de Juviles y conoció un período de esplendor gracias a la producción de seda. Válor fue cuna del más notorio alpujarreño de todos los tiempos: Fernando de Córdoba y Válor, más conocido como Abén Humeya. Proclamado Rey de Andalucía en 1568, fue el impulsor y primer dirigente de la Rebelión de Las Alpujarras, hasta que fue derrocado por su primo Abén Aboo.
Abén Humeya era miembro de una destacada familia morisca convertida al cristianismo tras la Conquista de Granada en 1492. Abjuró del cristianismo para recuperar la religión islámica y luchar contra la represión de la fe y las costumbres musulmanas, así como por el incumplimiento de las Capitulaciones de Granada. Dicha rebelión, que duró tres años y se extendió por todo el Reino de Granada, fue violentamente controlada y reprimida por Felipe II. Tras la expulsión de la población morisca, Válor fue repoblada con cristianos de Jaén. Los yacimientos arqueológicos permiten suponer asentamientos humanos, como el del Barrio Garzón, sobre el que se asientan los Barrios de Cantarranas y del Portel, o las Piedras de la Cárcel, en donde, según se dice por el pueblo, existía una iglesia y un presidio.
Espacios
El municipio de Válor cuenta con unos impresionantes parajes naturales asentados dentro del Parque Nacional de Sierra Nevada:
Alto de San Juan: Pico de 2.788 metros de altitud, con un amplio dominio sobre la Andalucía suroriental. Una de las Cumbres más significativas en el Itinerario Integral de Sierra Nevada. Situado en el límite norte del municipio.
Río Nechite: Nace en las cumbres de Sierra Nevada. Con encinares de media ladera y vegetación de ribera. Aparecen cortijos de alto valor etnográfico.
Río Válor: Parcialmente encajonado entre tajos y de pendiente acentuada, que desciende desde la base de las cumbres locales de Sierra Nevada, con bosque de galería formado fundamentalmente por sauces y álamos.
Castaño de la Cebadilla: Con más de doscientos años, se encuentra asentado sobre una roca y ha desarrollado unas gruesas raíces externas. Es uno de los ejemplares de mayor tamaño del municipio. Se ubica en la margen derecha del Río Válor.
Castaño de Miguel: con un grueso tronco de 25 metros de diámetro aproximadamente, se localiza al noroeste de Nechite.
Turismo
Adecuación Recreativa de Cuesta Viñas: en el paraje de Cuesta Viñas, al oeste del núcleo de Válor, bajo la carretera comarcal.
Adecuación Recreativa de La Tableta: localizada en el Extremo occidental del núcleo de Válor, en la margen derecha del Río Válor, bajo el puente de La Tableta.
Mirador de la Casa de Abén Humeya: en la Calle Carnicería.
Mirador de La Jarea: lo constituye un conjunto de dos eras escalonadas desde donde se domina gran parte de las Sierras de la Contraviesa, Gádor y Nevada. Parque Mirador de la Cruz: localizado junto a la carretera comarcal y el puente de los Yesos.
Refugio de Cuatro Caminos: ubicado a 200 m de los «Cuatro Caminos», bajo la pista central o de los 2.000 metros.